En vista del éxito que ha tenido mi primer post, me he decidido a continuar la serie, esta vez con algo más sofisticado (y caro)... conseguir una scrambler a partir de una Triumph Bonneville. Si, ya se que la misma marca ofrece un modelo de serie con estas características, pero aquí os voy a mostrar como se lo trabajan los mejores preparadores del panorama. Empezando por CRD, uno de los que mejor ha sabido entender lo que demanda la gente, motos únicas y con personalidad...
También con una personalidad arrolladora y, si cabe, más exclusiva está la Tramontana, el sueño de los hermanos López-Córdoba, ingenieros de desarrollo y pilotos probadores de Triumph, que han utilizado sus conocimientos y su acceso a piezas muy especiales, para parir esta belleza.
Como ejemplos más radicales podemos encontrar las imponentes "bonnies" nacidas de las manos de Ton-Up Garage. Motos con suspensiones pensadas para poder rendir en campo con garantías...
Incluso otras máquinas de aspecto más modesto pero con mucho trabajo detrás... Ruedas de tacos, manillar ancho, aletas recortadas y ya tenemos nuestra scrambler.
Me tengo que rendir a la evidencia, la Bonneville es una base que, si te lo puedes permitir, asegura siempre buenísimos resultados.
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